Me encantan estas recetas tan tradicionales, tan caseras y tan ricas... a ti no???
Este es un plato que podemos preparar en cualquier estación de año, bastará con que los tomates y pimientos estén a un precio asequible a nuestros bolsillos, aunque no se por que, en casa es más habitual prepararlo en verano. Es un plato muy fácil, económico, sano, energético y nutritivo... un plato muy "completito" diría yo!!!
Esta vez utilicé pimientos y tomates que plantó mi marido en el patio de su madre, sin abonos artificiales.
Los pimientos destacan por su alto contenido en vitaminaC, vitamina A, vitamina E, vitamina B6 y B12. Y es ideal para prevenir la aparición de enfermedades degenerativas y cronicas.
Los tomates son ricos en licopeno, una sustancia antioxidante que se convierte en vitamina A. Tambien contiene vitamina C y vitamina B.
Entre sus minerales destacan el potasio, fósforo, magnesio y calcio.
Contiene poca cantidad de calorías, grasas y sodio, por eso es ideal en dietas de adelgazamiento y de hipertensos.
Ayuda a realizar la digestión y mantener el sistema digestivo sano, siendo preferible comerlo con la piel porque aporta bastante fibra.
Ingredientes:
- Para la salsa de tomate clickas aquí
- 2 o 3 pimientos verdes italianos (los pequeños) por persona
- 500 /700 gramos de carne molida (pollo, cerdo o vacuno)
- 2 o 3 dientes de ajos
- Un ramillete de perejil
- 1 huevo batido
- 1 "chorrito" de leche (sin lactosa para intolerantes)
- Un poco de pan rallado (sin gluten para intolerantes)
- Sal y pimienta a gusto
- Aceite para freir los pimientos (uso de girasol por ser menos fuerte)
Nota adicional:
La receta está reeditada porque se eliminó sin querer, pero se conserva tal cual de publicó en su día.
Por desgracia vuestros comentario se perdieron... lo siento amigos!!
Elaboración:
Lo primero será ir elaborando la salsa de tomate casera, puedes verla si clickas aquí.
Mientras se cocina la salsa de tomate rellenamos y freímos los pimientos.
Haremos una masa igual que hacemos para las abondigas:
Ponemos en el vaso de la batidora la leche, el huevo, los dientes de ajos pelados, el perejil, la sal y la pimienta. Batimos todo junto y reservamos.
En un bol ponemos la carne picada y le añadimos los ingredientes que tenemos en el vaso.
Añadimos el pan rallado, un poco solamente, para que la masa "ligue" bien.
Cortamos el pedúnculo de los pimientos (el rabito), lavamos, secamos y rellenamos con la masa obtenida.
Freímos en abundante aceite, fuego medio/bajo y tapado, para que se cuezan un poco y no se quemen.
Apartamos sobre papel absorbente para que suelten exceso de aceite y reservamos.
Una vez esté lista la salsa de tomate incorporamos los pimientos y dejamos unos minutos a fuego suave para que tomen sabor.
Apartamos y servimos caliente, aunque fríos tampoco están nada mal... pero eso lo dejo a vuestra elección!!!
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